“Spiritus phantasticus: epifanía y artificio en el Primero sueño”
Resumen
A partir de la conocida mención que hace Aristóteles en De anima de la etimología de la palabra 'pháos' (luz), se generó un conjunto de ideas que trascendió de la Antigüedad al Barroco. Sinesio de Cirene, en su concepción del spiritus phantasticus -entendiendo a éste como espíritu animal, es decir, como función de los sentidos internos según la medicina antigua-, le atribuyó una luminosidad propia gracias a la cual podemos ver durante el sueño. Estas ideas de Sinesio, del siglo V y leídas por los neoplatónicos renacentistas, se enmarcan en la antigua creencia de que la visión se efectuaba por la emisión de rayos luminosos a través de los ojos, derivados de los espíritus animales, de naturaleza ígnea. Giordano Bruno, continúa Klein, concebía el spiritus phantasticus de Sinesio como "luz que es al mismo tiempo ojo". Ojo que ilumina y ve al mismo tiempo, eso es la imaginación o fantasía. Pico de la Mirándola, en su Heptaplus, define el spiritus phantasticus de Sinesio de Cirene como una sustancia luminosa. Así es como vemos a la fantasía en el Primero sueño: las "...mentales, sin luz, siempre vistosas/ colores...", de los versos 283-284, y las figuras "de la sombra no menos ayudadas/ que de la luz...", de los versos 876-877. La función del spiritus phantasticus es enlazar el cuerpo y el alma, tal como el ojo es capaz de combinar dos perspectivas opuestas, la general y la particular, que Leonardo definió como dos pirámides contrapuestas. En su soneto 208, "A una pintura de Nuestra Señora...", (O.C., t. I, p. 311) Sor Juana combina metáforas en torno a la luz de una pintura, de su modelo y de su pintor que, por grande, es convertido en lucero. El gasto de luz que éste hizo alude al spiritus phantasticus. La figura del mundo en el Primero sueño se identifica con la vieja forma aristotélica, a pesar de todas sus transformaciones. El alma de Sor Juana sueña consigo misma pintándose en el espejo de Faro. Ojo, luz y formas fantasmales: estos elementos son el instrumental por el que la emblemática asoma en los versos de El sueño. Imágenes no vistas, sino recordadas, interiorizadas y mimetizadas en el decurso del poema.
Palabras clave: Sor Juana Inés de la Cruz; Primero sueño; sueño; spiritus phantasticus; Sinesio de Cirene; Giordano Bruno; Pico de la Mirándola; Robert Klein; Aldo Masullo; alma; luz; ojo; fantasmas; fantasía; linterna mágica;
“Spiritus phantasticus: epifanía y artificio en el Primero sueño”, en “Injerto peregrino de bienes y grandezas admirables”. Estudios de literatura y cultura española e hispanoamericana (siglos XVI al XVIII), Ed. de Lillian von der Walde, María José Rodilla, Alma Mejía, Gustavo Illades, Alejandro Higashi y Serafín González, México, Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa, 2007, pp. 431-441.
Editorial
, Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa, Departamento de Filosofía